Miguel Navarro Centelles nace el 29 de septiembre en la localidad tierrabajina de Torrevelilla (Teruel). Su infancia transcurrió en su pueblo natal, donde asiste al colegio público, hasta que durante la Guerra Civil alterna su estancia entre Torrevelilla y Alcañiz.
Se estableció en Zaragoza después de la guerra civil. Sus primeros contactos artísticos tienen lugar en la Escuela de Artes y Oficios de Zaragoza. Pronto se hace miembro del Estudio Goya de esta ciudad y, durante varios años, dibujará del natural. Sus primeros trabajos fueron con José Codín, dedicándose a la restauración de iglesias, en las ornamentaciones del teatro Principal, en la remodelación del café Ambos Mundos y en la decoración de la iglesia de Cogullada. Posteriormente pasó a trabajar a la agencia de publicidad Suma, donde estuvo haciendo trabajos para las diapositivas de los cines, escaparates y vallas.
Entre 1948 y 1950 marcha a Madrid, en donde estudió dibujo y pintura. Durante dos años pasa las mañanas copiando las obras maestras expuestas en el Museo del Prado, y asistiendo, por las tardes, al Círculo de Bellas Artes.
Más tarde, abandona la vida bohemia y académica para regresar a Zaragoza, donde fija definitivamente su residencia. A partir de ahora, se dedicará al dibujo publicitario, profesión que ejercerá durante veinticinco años, formando la pintura aún parte de su vida como se muestra en las sucesivas exposiciones , colectivas e individuales, que van teniendo lugar de manera intermitente desde 1943. A partir de 1953 comenzará a trabajar en la agencia de publicidad Fontán, donde desarrolló su principal actividad profesional como dibujante publicitario. Trabajó en ella hasta su cierre, fundando con Salueña, director de Fontán, una nueva agencia MYA (Marketing y Anuncios).
En este período nunca abandonó, en ningún momento, su vocación pictórica.
En 1968 gana el primer premio en el concurso de carteles para anunciar las fiestas del Pilar, por unanimidad, con el cartel ?La ofrenda madre?, representación del busto de una baturra ofreciendo flores a la Virgen.
Ha expuesto sus lienzos en España y en el extranjero. De sus exposiciones destacan su participación en numerosos Premios San Jorge de Zaragoza; exposiciones en Zaragoza, Logroño, Valencia, Barcelona y Pilsen (antigua Checoslovaquia); ?Expo Aragón´84?; ?50×70 une profesion devote? (Francia); ?Aproximación al paisaje aragonés?; otra con Charles Cantemerignac (por invitación) ?Peintres de L´Aragón?.
Desde 1975 se dedicó de manera exclusiva a la pintura de caballete, algo que desde siempre había deseado. Siguió su vocación, de forma autodidacta. Su pintura, que él define como ?expresionista?, coquetea con éxito con aspectos más abstractos de vivo cromatismo. Su obra, bordada por el eclecticismo, incluye desde los más diversos encuentros de mujeres y hombres desnudos, bailarinas danzantes y fieles retratos a sobrios paisajes, naturaleza muerta, reflejos de los páramos de las tierras del Bajo Aragón y sus ya mencionados abstractos.
Su nerviosismo y autoexigencia quedan reflejados en algunas de sus pinturas. Acudía de manera rigurosa y absorbente, todas las mañanas, a su estudio de la calle Venecia para pintar y crear con las melodías seleccionadas por diversos programas de radio de fondo. Todo el tiempo que le pudo dedicar a su vida artística fue posible gracias al cuidado y al trabajo doméstico no remunerado proporcionado por su esposa, Alicia Delgado Burillo, diseñadora y modista de profesión. Sin ella su obra nunca hubiera sido posible. Con ella tuvo dos hijas y un hijo y ambos fueron abuelxs de dos nietas.
En 2012 abandonó toda actividad.
Obras en numerosas colecciones particulares.
Permanencia de obras en galerías locales y nacionales.